Un grupo cibernético con vínculos con la inteligencia militar rusa se convertirá en una importante amenaza global después de desempeñar un papel cada vez más crítico en el conflicto en curso en Ucrania, advirtió el miércoles una importante empresa de ciberseguridad.
Mandiant, propiedad de Google, dijo en un informe que está presenciando operaciones nefastas por parte del grupo denominado “Sandworm” en lugares de todo el mundo considerados puntos críticos políticos, militares o económicos para los intereses rusos.
"Hemos observado que el grupo mantiene operaciones de acceso y espionaje en América del Norte, Europa, Oriente Medio, Asia Central y América Latina", dijeron los investigadores de Mandiant en el informe.
"Con un número récord de personas participando en las elecciones nacionales de 2024, el historial de Sandworm de intentar interferir en los procesos democráticos eleva aún más la gravedad de la amenaza que el grupo puede representar en el corto plazo".
Hace cinco años, un gran jurado estadounidense acusó formalmente a una docena de oficiales de inteligencia militar rusos por su supuesta interferencia en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 que llevaron a Donald Trump a la Casa Blanca, según el FBI.
Trump vuelve a postularse para presidente, después de perder la reelección en 2020.
Según el informe Mandiant, Sandworm ha atacado repetidamente los sistemas e instituciones electorales occidentales, incluidos los de los países miembros actuales y potenciales de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
Sandworm ha “intentado interferir con los procesos democráticos en países seleccionados filtrando información políticamente sensible y desplegando malware para acceder a los sistemas electorales y reportar erróneamente datos electorales”, determinó Mandiant.
El grupo se estableció como la principal unidad de sabotaje cibernético de Rusia y el ejército del país ha confiado en él en su guerra contra Ucrania, según los investigadores.
Patrocinado por la inteligencia militar rusa, Sandworm “participa activamente en todo el espectro de operaciones de espionaje, ataque e influencia”, dijo Mandiant.
"Evaluamos con gran confianza que (Sandworm) es visto por el Kremlin como un instrumento de poder flexible capaz de servir a los amplios intereses y ambiciones nacionales de Rusia, incluidos los esfuerzos para socavar los procesos democráticos a nivel mundial", concluyeron los investigadores.
Las actividades del grupo, como intentar influir en las elecciones o tomar represalias contra organismos deportivos internacionales en controversias sobre dopaje de atletas, sugieren que "no hay límite para los impulsos nacionalistas" que pueden impulsar la agenda de Sandworm, según el informe.