La invención utiliza las emociones humanas aprendidas por la máquina para 'conducir' vehículos autónomos

Actualización: 10 de diciembre de 2023

Los estadounidenses tienen uno de los niveles de miedo más altos del mundo cuando se trata de la tecnología relacionados con sistemas robóticos y vehículos autónomos. Abordar estas preocupaciones es primordial si la tecnología espera avanzar.

Un investigador ha desarrollado una nueva tecnología para sistemas autónomos que responde a las emociones humanas basándose en los estados de ánimo humanos aprendidos por la máquina. Su solución, “Control adaptativo del estado de ánimo en vehículos semiautónomos o totalmente autónomos”, ha obtenido una patente de utilidad muy competitiva de la Oficina de Patentes y Marcas Registradas de los Estados Unidos para FAU.

Adaptive Mood Control proporciona una experiencia conveniente, agradable y, lo que es más importante, confiable para los humanos que interactúan con vehículos autónomos. La tecnología se puede utilizar en una amplia gama de sistemas autónomos, incluidos automóviles autónomos, vehículos militares autónomos, aviones o helicópteros autónomos e incluso robots sociales.

“La singularidad de esta invención es que los modos operativos y los parámetros relacionados con la emoción percibida se intercambian con vehículos adyacentes para lograr los objetivos del control adaptativo del estado de ánimo. módulo en el vehículo semi o totalmente autónomo en un contexto de conducción cooperativa. La interacción entre humanos, IA y autonomía está en el centro de atención de la academia y la industria. Más específicamente, la confianza entre los humanos y la IA/tecnologías autónomas juega un papel fundamental en este ámbito, porque afectará directamente la aceptabilidad social de estas tecnologías modernas.

La patente, titulada "Control adaptativo del estado de ánimo en vehículos semiautónomos o totalmente autónomos", utiliza soluciones sensoriales no intrusivas en vehículos semiautónomos o totalmente autónomos para percibir el estado de ánimo de los conductores y pasajeros. La información se recopila en base a expresiones faciales, sensores dentro de las asas / asientos y cámaras térmicas, entre otros dispositivos de monitoreo. Además, el sistema de control adaptativo del estado de ánimo contiene mecanismos de aprendizaje automático en tiempo real que pueden seguir aprendiendo el estado de ánimo del conductor y de los pasajeros a lo largo del tiempo. Luego, los resultados se envían al sistema de software del vehículo autónomo, lo que permite que el vehículo responda a las emociones percibidas al elegir un modo de operación apropiado, como el modo de conducción normal, cauteloso o alerta.

Uno de los principales problemas con la tecnología de los vehículos completamente autónomos o semiautónomos es que es posible que no puedan predecir con precisión el comportamiento de otros vehículos autónomos y conducidos por humanos. Esta predicción es fundamental para navegar correctamente autónomo vehículos en carreteras.